Neiser, rebeldía y desparpajo en su primer clásico capitalino

A principio de semestre, en medio de la incertidumbre generada por un periodo de fichajes sin grandes noticias, una de las grandes apariciones del Sudamericano Sub-20 era un juvenil de Millonarios que, a pesar de que ya tenía varias convocatorias con el equipo profesional, no había logrado irrumpir de manera estrepitosa, cosa que si consiguió en el último clásico capitalino -el primero de su carrera-.

Jugando de delantero centro y con una calidad innata, Neiser fue un peligro constante para Santa Fe desde el inicio del juego. De hecho, la primera llegada de Millonarios, producto de un remate de media distancia, fue gracias a él.

Luego de esto y tomándose confianza con el correr de los minutos, el juvenil tuvo tres remates más (52', 56' y 68'), siendo el último el que mayor peligro generó -pasó rozando el palo izquierdo del arco rival-.

Con el gol de Luis Marimón y los espacios que dejó la visita, Neiser flotó por todo el frente de ataque y, en el minuto 70, influyó directamente en el marcador, asistiendo a Kevin Palacios, quien decretó el 2-0 final.

Minutos antes de ser sustituido, fue el centro de atención cuando, tras pararse en el balón, recibió empujones y golpes de los jugadores rivales. Además, levantó una polémica, que sigue activa, sobre si este tipo de jugadas en realidad aportan o son únicamente para provocar al adversario.

Lo que sí es claro es que Millonarios necesitaba un jugador con la osadía, el talento y la confianza del #88. Sobre todo en este momento de crisis de resultados. Antes de salir a Europa, donde seguramente continué su carrera, Neiser debe ser consciente que tiene las condiciones de dejar un grato recuerdo en el club que lo vio crecer como profesional. Es distinto y él lo sabe.