Somos campeones otra vez

La tarea era sencilla: buscar lo antes posible el primer gol y luego sentenciar el partido.

Millonarios saltó al campo con una nueva camiseta, una de color azul más oscura de lo que estamos acostumbrados, con visos dorados y figuras geométricas al frente. Los once jugadores que conformaban la titular eran Montero; Alfonzo, Llinás, Arias, Banguero; Guerra, Vega, Giraldo, Macalister; Giordana y Castro.

En los primeros minutos Millonarios tenía el balón, atacaba pero igualmente se notaba la presión. Casi todos los remates de la primera parte fueron de cabeza. Mientras tanto, el Junior, además de quemar tiempo, intentaba llegar de contraataque. Y allí ya se empezaban a vestir los centrales como figuras, en especial ese monito.

Iniciaron los últimos 45. Al inicio parecía que al azul le costaba más. Al minuto 53, luego de una jugada enredada, Leo Castro pudo hacerle un pase a Giordana. El argentino quedó de frente al arquero rival y la mandó a guardar. El estadio estalló en un solo grito. Quedaba toda la segunda parte y los hinchas sabíamos que teníamos con qué ganarlo.

Al 72 Chará tuvo un mano a mano con Montero que el arquero resolvió de una manera espectacular. Ojalá esa no haya sido su última atajada como embajador. El global estaba 1-1 y parecía que otra vez Millonarios resolvía una final por penales. Pero sabíamos que el azul tenía con qué.

Faltando 7 minutos para el final, luego de una jugada colectiva, le quedó el balón al capitán que le hizo un pase para que Leo Castro quedara frente al arco. El 23 con tranquilidad la mandó a guardar al lado del palo. 2-0 y Millonarios ya sentía la Copa.

Roldán pitó el final y el estadio, al igual que hace 7 meses, volvió a estallar de felicidad.

Otro título, somos campeones otra vez.