En otra decepcionante presentación de local, Millonarios empató 1-1 con Rionegro Águilas, el colero del campeonato, y sumó su 5to punto de 12 posibles.
Rionegro Águilas no anotaba gol hacía más de 300 minutos. No había ganado (ni siquiera empatado) ningún partido en la presente liga y venía de colero ante un Millonarios que había jugado muy bien el jueves ante Bucaramanga y que en un estadio repleto de niños, se esperaba mostrara buen fútbol y por supuesto, actitud. Mucha actitud. Después de todo, tenía la oportunidad de en un partido, hacer nuevos hinchas y cumplirles a los de siempre.
Pero Millonarios, que formó con Vikonis; Palacios, de los Santos, Cadavid, Banguero; Duque, Rojas; Mosquera, Quiñones, Riascos y del Valle, careció de actitud, de fútbol y de seriedad para encarar un partido que debió haber ganado sin ningún problema. Sumado a la actitud de los jugadores en el campo, Russo volvió a errar en la lectura del partido, hizo unos cambios que facilitaron el empate del rival y lució como el gran culpable de la noche.
Primer tiempo
Millonarios salió a caminar la cancha, no fue intenso y Rionegro, aunque con poca profundidad, era el dueño de la posesión. El aburrimiento invadía a los espectadores hasta que al minuto 39, Harold Santiago Mosquera, que continúa con un gran nivel, asistió a tres dedos, por el piso, desde el costado izquierdo, a Duvier Riascos, que esperaba en el centro del área y que anotó el 1-0 con el que terminó el primer periodo.
Segundo tiempo
El gran protagonista del segundo tiempo fue el técnico de Millonarios: Miguel Ángel Russo. Si bien el equipo nunca fue intenso, el partido parecía controlado. Pero Russo decidió meter mano, pero la metió mal. El argentino decidió sustituir a Del Valle por Domínguez al minuto 64, cambio que no dio resultado ya que el "Carachito" no aportó ni marca ni tenencia; a Vega por Duque (Stiven se vio perdido en la mitad de la cancha y tampoco apoyó en marca) y a Alexis Zapata por Henry Rojas. Russo, al sacar a los dos ejes del equipo y los máximos recuperadores, dejó a Millonarios desprotegido en la mitad del campo, donde Daniel Hernández, el mejor jugador de Rionegro, se empezó a asociar con sus compañeros y a llegar, poco a poco, a las cercanías del arco de Vikonis. Tanto insistió Hernández que encontró la recompensa al minuto 84: ante de la pasividad de los azules, que vieron como hizo una pared y adelantó el balón para ganarle a Cadavid en velocidad, definió fuerte al palo izquierdo de Vikonis para empatar el partido. Después del gol Millonarios sí se mostró intenso, con actitud, con seriedad, pero ya era muy tarde. Ese juego de los últimos 9 minutos (hubo 3 de tiempo adicional) debió haber sido la constante en el partido en el que Millonarios dejó ir dos puntos en El Campín ante el colero.
Millonarios enfrentará a Alianza Petrolera el jueves por la vuelta de los octavos de final de la Copa Águila y posteriormente, visitará el domingo 30 de julio al Deportes Tolima.