Algunos desde la misma Tunja, otros recorriendo más de 150km desde Bogotá, la mayoría quizá, y otros de cercanías en Boyacá. Los 14 mil, los 15 mil o los 16 mil que estuvieron presentes en el estadio La Independencia de Tunja se merecen todo el reconocimiento del mundo.
Qué triste que el equipo no respondió a la altura, a lo que realmente merecían los hinchas. Los únicos a los que se les puede rescatar algo es a Cataño y a Giordana. Sí, los que entraron con menos de 30 minutos por jugar.
Y no es la primera vez que vemos este acompañamiento de los hinchas. La que tenemos más presente es la de cuadrangulares en el primer semestre de 2023, antes de ser campeones. Pero es que en este último partido era demostrarle a los jugadores que sin importar si estamos fuera de los 8, sin importar el juego de los últimos partidos, igual los íbamos a acompañar hasta la luna.
La figura, indiscutiblemente, han sido los hinchas. Los que sin importar el rival, la cancha, la temperatura, el dinero, el presente o la competición, van a acompañar al azul hasta que tengan vida.
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