Se revive un equipo; se entierra la ilusión
- Andrés Suárez
- hace 2 minutos
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Millonarios terminó una terrible y penosa presentación en el Hernán Ramírez Villegas de la ciudad de Pereira y cae 3-2 ante un equipo que venía mal, con varias bajas, pero que hoy revivió un equipo que tuvo los deseos de jugar y liquidó a otro que solo quiere cumplir los partidos hasta la fecha 20 para así marcharse.
El ‘matecaña', con la necesidad de ir por los tres puntos y más siendo local, tomó la iniciativa en los primeros minutos, pero sin mayor peligro. Aprovechando una salida colectiva rápida, Helibelton Palacios gana por su banda, asiste al goleador del equipo, al que no perdona y, al minuto 10 del encuentro, Leonardo Castro manda a guardar el esférico para poner el 1-0 que sería invalidado por el juez de línea; sin embargo, el VAR revisa y valida el gol.
Impulsados por el gol, Millonarios sube su ánimo y busca ampliar la diferencia; tras una seguidilla de rebotes, al minuto 18, después de un despeje, el goleador desea repetir y saca una media volea con potencia, la cual sería atajada con exigencia y de muy buena manera por el arquero Ichazo.
Sin bajar los brazos tras recibir el 1-0, el local se sacude y, luego de una transición veloz donde participa un ex Millonarios, Largacha pone 1 a 1 a Carlos Darwin Quintero vs. Moreno Paz, siendo el defensor el perdedor, y generaría pena máxima tras un agarrón en la camiseta del atacante. Yesus Cabrera cobraría y llegaría el empate para el Pereira al minuto 25.
Los minutos corrían y, sin hacerse daño, el 1-1 parecía el resultado para ir al descanso, pero en el último ahogo del primer tiempo, tras una posesión fallida junto con una entrega errónea, en dos pases el local aprovecha los notables espacios que hay en el medio y Gustavo Torres marca una diagonal en la que sabe ubicarse, moverse y define para poner el 2-1 al 47 de juego.
Con tres amarillas y un juego al que su rival le dio vuelta, Millonarios va al descanso desubicado, intranquilo, ansioso y con una presión de estar quedando eliminado por la diferencia de gol que seguía aumentando.
Sale Dewar Victoria para la parte complementaria e ingresa Jorge Hurtado, queriendo contener más al rival en su propio terreno de juego y buscando nuevas posibilidades de gol. Sin embargo, dormidos y con errores repetitivos, Arévalo intenta salir jugando en área propia y, tras un control terrible, el rival saca un soberbio remate que ataja Novoa, dando así un rebote que manda a guardar Torres, pero es invalidado por fuera de lugar.
Más cerca del tercero que Millonarios de lograr la igualdad, al minuto 63 de juego el ‘matecaña’ saca un potente remate que atrapa Diego Novoa sin complicaciones. Queriendo sacudir el equipo, sale del campo Beckham David Castro e ingresa Edwin Mosquera al minuto 65.
Intentando por todas partes, tras una falta por banda derecha, Danovis Banguero saca un direccionado cobro de tiro libre con pierna izquierda, el cual se fue cerrando en el travesaño del guardameta uruguayo, quien nuevamente ahogó el grito de gol del conjunto ‘embajador’ al minuto 67.
Después de varios meses, David Mackalister Silva vuelve a las canchas al ingresar al minuto 72 por Nicolás Arévalo. Santiago Giordana sumaría minutos para reemplazar a Leonardo Castro, pero esto solo dio pie para el inicio de jugada que terminaría en el tercer gol del Pereira al minuto 74, luego de una salida en falso de Novoa que de forma tranquila define Quintero de cabeza y termina de sepultar el partido para el azul.
Quemando el último cartucho, buscando la heroica, ingresa Cristian Cañozales al minuto 78 de juego, sustituyendo a Alex Castro. Pasaron los minutos y, con más pelotazos que fútbol, Millonarios consigue el 3-2, luego de una acción individual de Mackalister en la cual logra conseguir una falta y, tras ser ejecutada, en una serie de rebotes le queda a Santiago Giordana y marca para así terminar el partido.
Millonarios no solo se alejó nuevamente de entrar a los cuadrangulares, también demostró que en todas las decisiones que se toman dentro y fuera de la cancha, se está fallando y ya nos pasó factura.
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