Ayer Millonarios de nuevo cayó por cuarta ocasión consecutiva ante su gente en un encuentro raro, donde todo lo que nos salía hace unos días en las victorias que logramos ante América de Cali y Nacional o en ese recordado juego contra Peñarol en Bogotá el año pasado, hoy por hoy ya no nos sale. Si se nos lesiona nuestro goleador, también corremos con la mala fortuna que el delantero suplente en una de las primeras pelotas que corre siente una molestia que lo saca a los pocos minutos de su ingreso.
De paso, nuestra defensa no logra tener ese primer pase que los identifica, nos metemos un autogol insólito, la calidad que caracteriza a nuestro '10' no estuvo y todas las opciones que creamos de gol no van para adentro.
El ser humano es un ser imperfecto que está en constante aprendizaje, crecimiento y desarrollo. Y los jugadores a lo largo de su carrera futbolística, se enfrentan a diferentes retos, obstáculos y fracasos que pueden desanimarlos, desalentarlos y hacerlos sentir como si nunca pudieran superarlos. Sin embargo, la persona tiene una capacidad única y valiosa que le permite levantarse siempre, una vez más de las que se cae, y esa es la capacidad de resiliencia.
En la vida como en el fútbol, es importante recordar que todos tenemos la capacidad de levantarnos después de una caída o de una mala racha llena de infortunios como la que estamos pasando. No importa cuán grande o difícil sea el obstáculo que se presente, siempre hay una oportunidad para aprender, crecer y avanzar. En lugar de enfocarse en el fracaso, es importante hacerlo en las lecciones que se pueden aprender y utilizar esa experiencia para seguir adelante con más sabiduría y determinación.
Y a veces aunque podemos levantarnos solos ante las adversidades, que diferencia es tener todo un estadio apoyándote y aplaudiéndote después de una derrota, así todos seamos conscientes que se está pasando por uno de los peores momentos de este proceso del profe Gamero. Esto para mí es un envión anímico que significa "Siempre vamos a estar" y ratifica esa barra que se escucha desde la popular norte con más sentimiento en estos últimos juegos que dice: Recuerdo que juntos pasamos muy duros momentos, pero Millonarios realmente es un sentimiento.
No nos bajemos de este bus y aunque hay cierta gente por ahí que quiere que todo esto se acabe para traer a no sé quién, no les pongamos cuidado y sigamos llenando de motivación a cada uno de los integrantes de este majestuoso plantel que en los últimos años nos han dado alegrías que jamás vamos a olvidar, y que estoy seguro que vamos a recordar siempre con una sonrisa cuando las contemos. Hoy más que nunca debemos estar unidos caminando hacía el mismo lado y así como ayer se escuchó en el 'Coloso de la 57' a una sola voz el 'Gamero, Gamero, vamos vamos Gamero' mientras el pedía excusas a toda la afición, sigamos con ese apoyo que llene el corazón de la mejor energía de los jugadores, cuerpo técnico y todos los que hacen parte de esto para que se mantenga la ilusión de pronto poder revertir este presente.
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